07 de mayo de 2018
El gestor aeroportuario español Aena espera un crecimiento del tráfico del 5,5% para 2018. Es un momento de pujanza de la industria, en el que las aerolíneas, tras llevar a a cabo reestructuraciones y ajustes para afrontar su superviviencia en el mundo del bajo coste, no quieren frenar su crecimiento ni en rutas ni en capacidad, dos variables que vienen marcadas por la posibilidad de contar con tripulaciones que les permitan operar las adquisiciones de nuevos aparatos y la ampliación de frecuencias a los destinos. Sabida es la demanda de pilotos con años de experiencia, pero las plantillas tienen actualmente más necesidades. Iberia ha abierto este lunes una nueva oferta de empleo para tripulantes. Se trata en este caso de técnicos pilotos de nuevo ingreso y la convocatoria no tiene fecha de cierre.A primeros de junio, la mayor aerolínea española comenzará sus pruebas de selección, a las que podrán optar quienes cumplan los requisitos mínimos de estudios, cualificación ATPL(A) frozen EASA parte FCL y MCC, certificado médido y nivel de inglés y castellano. Hace tan sólo unos días Air Europa anunciaba que 400 pilotos optaban a sus 50 plazas para copilotos que volarán su flota Embraer, habitualmente de vuelos regionales que está incrementando. La aerolínea del grupo Globalia se encuentra, por otro lado, inmersa un proceso de modernización y aumento de flota de aparatos modelo Dreamliner de Boeing, que de crecer también podría necesitar de nuevos tripulantes.Entre los planes de la low cost española Vueling, por ejemplo, está la incorporación de entre 150 y 200 pilotos. Hace un par de meses anunciaba que necesitaba cubrir 90 salidas en 2017 en su plantilla de más de 1.100 pilotos. Y es que de esta aerolínea, como le ocurrió a Ryanair, también salieron el pasado año algunos tripulantes en dirección a Norwegian. En parte, según los pilotos de la seccón sindical de esta compañía en Sepla (actualmente en conflicto con Vueling), porque la expansión en el extranjero de la Vueling no garantiza un porcentaje mínimo de expansión en España, con el consiguiente posible cambio de base al extranjero para algunos de sus pilotos. Sea donde fuere, las compañías españolas están en proceso de incorporación de pilotos, acondicionando sus plantillas a las necesidades presentes y a las de corto plazo. Pero también llenando sus alforjas de cara a la previsible escasez que los dos mayores fabricantes aeronáuticos mundiales anuncian para 2035. 1.098 pilotos faltarán en España, según Boeing, y 30.000 profesionales al año se demandarán en todo el mundo, adelanta Airbus.
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